Tomado de: DIARIO PREGÓN DE LA PLATA
El Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas le recomendó a la Argentina legislar sobre el aborto para ayudar a las mujeres
En la foto: La ONU exhortó a la Argentina legislar sobre el aborto ¿Quiénes son los genocidas inhumanos que pretenden asesinar a seres humanos concebidos?
“Recomendaciones” es el nombre que reciben las órdenes que son impartidas por los poderes internacionales a las diversas Naciones, violando la Soberanía de las Naciones. La recomendación de la ONU para la Argentina, esta vez incluye la orden de aprobar legislativamente el aborto para asesinar a los bebés concebidos en un país demográficamente despoblado como es el nuestro.
¿Qué nos ha dicho Benedicto XVI al respecto, en la Encíclica Caritas in Veritate? El Papa hizo alusión allí en el N° 67 a la urgencia de la reforma tanto de Organización de las Naciones Unidas como de la arquitectura económica y financiera internacional, para que se dé una concreción real al concepto de familia de naciones… con vistas a un ordenamiento político, jurídico y económico que incremente y oriente la colaboración internacional hacia el desarrollo solidario de todos los pueblos… urge la presencia de una verdadera Autoridad política mundial, como fue ya esbozada por mi Predecesor, el Beato Juan XXIII. Esta Autoridad deberá estar regulada por el derecho, atenerse de manera concreta a los principios de subsidiaridad y de solidaridad, estar ordenada a la realización del bien común, comprometerse en la realización de un auténtico desarrollo humano integral inspirado en los valores de la caridad en la verdad. Dicha Autoridad, además, deberá estar reconocida por todos, gozar de poder efectivo para garantizar a cada uno la seguridad…”
Tal párrafo de la Encíclica no forma parte del Dogma, ni ha sido pronunciado ex-cathedra a pesar de encontrarse inserto en un documento semejante, pues por su naturaleza las Naciones Unidas son un organismo temporal que incluso puede desaparecer (tornando nulo lo afirmado por el Papa). No hace falta “creer” en las Naciones Unidas para la salvación del alma, y mucho menos hacerle caso en medidas como las que actualmente pretende imponer dicho organismo.
La Argentina no puede menos que desconocer, rechazar y repudiar el actual sistema de las Naciones Unidas, sobre todo cuando pretende imponer tales crímenes como el aborto generalizado, el cual no es más que un simple y llano genocidio contra indefensos.
La excusa del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas es "ayudar a las mujeres "a evitar embarazos no deseados" y las prácticas quirúrgicas clandestinas... pero ¿quién ayudará al bebé concebido que asesinarán? Dicho Comité no pide auxilios económicos para las madres embarazadas, ni la represión del delito del aborto, sino que pretende ELIMINAR vidas “no deseadas”. Seguramente en otra oportunidad pedirán la eutanasia porque los mayores también se convertirán en “vidas no deseadas”, o en la masacre de quienes pierdan habilidades económicas y posibilidad contributiva de impuestos por ser “vidas improductivas no deseadas”. ¿Y si las vidas “no deseadas” fueran las de quienes firmaron y avalaron tal informe? ¿No se puede imponer la “pena de muerte” a tales “vidas no deseadas” de los que firmaron el informe para promover un genocidio?
El Comité, organismo de control del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, exhortó a la Argentina a ‘modificar su legislación de forma que la misma ayude efectivamente a las mujeres a evitar embarazos no deseados‘. ‘Y que Éstas no tengan que recurrir a abortos clandestinos que podrían poner en peligro sus vidas‘, añadió.
Si el aborto pone en peligro la vida de las mujeres, pues no se debe abortar, a fin de respetar a la vida genéticamente humana que ha sido concebida en un vientre materno.
El organismo expresó ‘su preocupación por la legislación restrictiva del aborto contenida en el artículo 86 del Código Penal‘, que sostiene que ‘el aborto... no es punible si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre y si este peligro no puede ser evitado por otros medios‘ o si ‘el embarazo proviene de una violación o de un atentado al pudor cometido sobre una mujer idiota o demente‘. Eso sí, a los militares de la década de 1970 hay que torturarlos y negarles sus derechos constitucionales y las garantías del Pacto de San José de Costa Rica en una lenta agonía ya que son todos mayores de edad e “improductivos” por lo que se convierten en “vidas no deseadas”… eso y el aborto, ambas cosas están bien para el Comité.
El comité de la ONU criticó ‘la inconsistente interpretación por parte de los tribunales de las causales de no punibilidad contenidas en dicho artículo‘. La Argentina ‘debe igualmente adoptar medidas para la capacitación de jueces y personal de salud sobre el alcance del artículo 86 del Código Penal‘, recomendó el documento.
Pretenden dictár cátedras de “Derecho Antinatural” desde un sitial utilizado para “pontificar y despontificar”, con cuasi autoridad Papal, pero no para defender la vida sino para violentarla y destruirla.
Veamos los términos imperativos utilizados y recalcados en negrita en el informe: “El Estado Parte debe modificar su legislación de forma que la misma ayude efectivamente a las mujeres a evitar embarazos no deseados y que éstas no tengan que recurrir a abortos clandestinos que podrían poner en peligro sus vidas. El Estado debe igualmente adoptar medidas para la capacitación de jueces y personal de salud sobre el alcance del artículo 86 del Código Penal”.
¿Es esto una “recomendación”? No, es una orden, utilizando en cada oración la palabra DEBE como obligación.
Semejante informe inconsistente, que no resguarda la vida del bebé concebido, y que omite los Derechos del Niño (se es niño ya desde la concepción en el seno materno y no desde el alumbramiento, con derecho incluso a heredar, por ejemplo). No cabe más que el repudio a tal documento y a quienes lo firmaron, conjuntamente.
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