El gran cisma modernista del Siglo XXI Parte 3

Condena arzobispo al cismático "Consejo Católico de América"


La Iglesia Católica de EE.UU. está en peligro. No es una amenaza. Este cisma se avecina en Detroit.


La amenaza proviene de modernistas-progresistas dentro de la Iglesia Católica en los EE.UU.. Estos son "católicos" que ven el Concilio Vaticano II como una especie de hito, una ruptura con la tradición católica, y una licencia para seguir adelante con varias "reformas" y todas las innovaciones en el nombre del "Espíritu del Vaticano II."


Estas personas, tanto clérigos como laicos, se han pronunciado en diversas parroquias y diócesis en los Estados Unidos como dictadores. Han manifestado su odio por el retorno a la tradición y promueven los abusos de la liturgia y la doctrina de la Iglesia de una manera retorcida. Llegaron a estar como influencia de poder mientras la revuelta del catolicismo en las décadas posteriores del Concilio Vaticano II (1970 - 1990). Ahora que su influencia está empezando a decaer bajo el pontificado de Benedicto XVI, estos disidentes liberales de la Iglesia han chocado contra la pared. Ellos saben que sus días están contados, y así, en un intento desesperado por conservar lo que han trabajado tanto tiempo, tratan de darle un nuevo impulso a una nueva generación con su influencia herética, estas personas están tratando de crear un consejo que rivalice contra el Papa y el clero en América.
Se llama el Consejo Católico de América (o CCA), y tendrán su primera reunión programada para el 10 al 12 junio de 2011 en el Centro de Convenciones de Detroit y Detroit Marriott Renaissance Center.


En respuesta, el Arzobispo Allen H. Vigneron ha emitido la siguiente declaración condenando al Consejo Católico de América. Éstos son los aspectos más destacados:


Arquidiócesis de Detroit - ... Aunque su propósito declarado es "regresar al espíritu del Concilio", convocando a la feligresía junta para demostrar su compromiso y volver a los documentos emitidos por el Concilio Vaticano II, éstos ofrecen algunas aspiraciones inválidas para la Iglesia. De hecho, los objetivos propuestos son en gran parte en oposición a las enseñanzas del mismo.


La arquidiócesis desea felicitar y abrazar a todos los esfuerzos ciertos en la renovación de la Iglesia - La Iglesia del Consejo de Católicos de América en su agenda no muestra tal esfuerzo. Algunos de los oradores anunciados y los grupos de la organización el esfuerzo defienden posiciones que son claramente contrarias a la fe católica, que conducen al distanciamiento con la Iglesia Católica. La Arquidiócesis de Detroit advierte a cualquier católico que debe estar en contra de participar en las sesiones del Consejo Católico y en el  encuentro nacional de junio en el 2011. Ninguna parroquia, escuelas, e instituciones de esta Arquidiócesis  deberán acoger estas reuniones, encuentros, o sesiones asociadas con la planificación de la 06 20 11 del  Consejo Católico de América. Los sacerdotes, diáconos y ministros laicos eclesiales deben evitar prestar apoyo a un esfuerzo tan equivocado. En nombre de la Arquidiócesis, el Arzobispo Vigneron ha pedido a los organizadores a cancelar sus planes para este encuentro nacional en el que se distorsiona el verdadero espíritu del Concilio Vaticano II. Él nos pide a todos a orar por la guía del Espíritu Santo para que podamos abrazar auténtico desarrollo de la fe y la moral, y rechazar los esfuerzos que ponen en peligro la unidad.


La declaración completa aquí


Estas personas son el resultado final de un experimento de tres décadas en la innovación del llamado "Espíritu del Vaticano II", que toma sobre sí las iniciativas del Concilio Vaticano II, este cisma sin embargo, no viene sin una lista de las herejías que lo acompañan. Se trata de una lista que me atrevo a decir conoce casi la mitad de todos los católicos bautizados en los Estados Unidos. Se trata de una lista que me temo que pronto llegará a la totalidad de la feligresía, y repercutirá en toda esta nación.


Lo que estas personas en el Consejo Católico de América quieren ya ha sido inventado. 
Las estructuras que defienden ya existen. Se llama la Iglesia Episcopal. Tienen entre sus propósitos, a saber, la aprobación clero femenino, el clero gay, los matrimonios homosexuales, la aceptación y el control de la natalidad o aborto, así como el abrazo del socialismo en la forma de "teología de la liberación."


Lamentablemente, no existe la posibilidad de que la reunión del CCA en junio sea cancelada. A pesar de que la petición del arzobispo, la organización es fuerte, no hay mucho que se pueda hacer fuera de la prohibición de pedirle a su propia feligresía de ser parte de ella, y la de utilizar la propiedad diocesana para ello. Sin embargo, el CCA no pretende utilizar la propiedad diocesana, como también el arzobispo pueda restringir el que las personas fuera de su Arquidiócesis puedan asistir. Esa es otra razón por la cual se necesita una condena a nivel de todos los Obispos Católicos de América antes de que sea demasiado tarde. 
Tenga presente  esto: estas personas se organizan y promoverán la herejía. Del mismo modo que crecerán para dirigir a otras personas fuera del magisterio de la Iglesia. Si no se actúa ahora sólo se traducirá en repercusiones mayores  más adelante. Por el bien de la unidad y la ortodoxia dentro de la Iglesia Católica, oremos para que nuestros obispos actúen con rapidez.