Médico abortista enfrenta cargos por asesinato

Un médico que hizo abortos a mujeres pertenecientes a minorías, inmigrantes y pobres en una clínica calificada de "casa de los horrores'' fue acusado de ocho cargos de asesinato por la muerte de una paciente y siete bebés que nacieron vivos y luego fueron asesinados con tijeras, dijo la fiscalía el miércoles.
El doctor Kermit Gosnell, de 69 años, hizo millones de dólares durante un período de 30 años, llevando a cabo tantos abortos ilegales de final de embarazo como pudo, dijo la fiscalía. Los reguladores estatales ignoraron las quejas en su contra y no inspeccionaban su clínica desde 1993, pero no se presentaron cargos en contra de ellos debido a los límites de tiempo y a las leyes existentes, dijo el abogado de distrito Seth Williams.
Sus pacientes se vieron sujetas a condiciones sórdidas en la clínica Women's Medical Society de Gosnell, donde él llevaba a cabo docenas de abortos al día, dijo la fiscalía.
A principios del año pasado, las autoridades fueron a la clínica a investigar quejas relacionadas con medicamentos y se tropezaron con lo que Williams llamó una "casa de los horrores''.
La clínica fue clausurada y la licencia médica de Gosnell suspendida después de la redada.
Gosnell y cuatro de sus empleados fueron acusados de asesinato, y otros cuatro fueron acusados de violaciones de medicamentos controlados y otros delitos. Ninguno de los empleados tenía entrenamiento médico alguno, y uno de ellos, un estudiante de secundaria, administraba anestesia intravenosa con narcóticos potencialmente letales, dijo Williams.
Los 10 acusados fueron detenidos, dijeron las autoridades.
Dos de los números telefónicos listados de Gosnell en Filadelfia fueron desconectados. El abogado de la defensa William J. Brennan, quien representó a Gosnell durante la investigación, señaló que el médico estuvo brindando servicios a pacientes en un barrio de bajos ingresos durante décadas.
"Evidentemente, estas acusaciones son extremadamente serias'', dijo Brennan.
El jurado de instrucción dijo que la mujer que falleció vino a la clínica de Gosnell para hacerse un aborto y falleció de un paro cardíaco porque le administraron demasiado Demerol. Gosnell no estaba en la clínica en ese momento, pero dio instrucciones a su personal de que le administraran el fármaco para mantener sedada a la mujer, quien estaba saludable y tenía 41 años, hasta que él llegara, dijo la fiscalía.
A Gosnell le han presentado por lo menos 46 demandas por negligencia médica, entre ellas una por la muerte de una mujer de 22 años que murió de septicemia y de una perforación de útero en el 2000.


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