Según este rotativo, que cita fuentes de seguridad, la rama de Al Qaeda en el Magreb tenía previsto perpetrar ese atentado kamikaze en el centro de la capital entre los pasados jueves y viernes, día en que la selección argelina se enfrentó a la inglesa en un encuentro decisivo para la clasificación a los octavos de final del grupo C.
Las fuerzas de seguridad obtuvieron indicios de que el atentado se estaba preparando gracias a la información obtenida en el interrogatorio de un importante activista de AQMI detenido la semana pasada.
Gran parte de la célula de apoyo a los terroristas que preparaba la acción fue desarticulada, aunque algunos integrantes de la misma consiguieron eludir el cerco policial, según las mismas fuentes.
Al no conseguir detener al presunto terrorista suicida que iba a ejecutar el atentado, las fuerzas de seguridad redoblaron la vigilancia e intensificaron los controles en los accesos a la capital a lo largo del pasado fin de semana.
Estas medidas se mantendrán en los próximos días hasta conseguir capturar a todos los miembros del grupo que preparaba la acción, indicaron las fuentes citadas.
El centro de Argel no es escenario de un atentado suicida desde el 11 de diciembre de 2007, cuando una doble acción kamikaze con sendos coches bomba contra la sede de la ONU y contra el Consejo Constitucional causó 31 muertos.Sólo el barrio de Bordj el Kiffan, en las afueras del este de la capital, sufrió desde entonces un ataque suicida en 2008 contra un cuartel de la Gendarmería en el que murieron tres personas.
Decenas de barreras fijas y móviles de la Policía y la Gendarmería controlan permanentemente desde hace años los accesos y las principales arterias de la capital para impedir cualquier acción terrorista, lo que suele provocar enormes atascos en las horas punta del día.
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