sábado, 6 de noviembre de 2010

"Encuentro y no enfrentamiento": El Papa en Barcelona

El Papa lanzó inesperadamente un "auténtico bombazo", como lo calificó un diario español, ante 60 periodistas en el avión especial que lo llevaba con su comitiva a Santiago de Compostela desde Roma.
Tras decir que hay un choque entre "fe y laicidad " en España y Occidente, que debería convertirse "en un encuentro y no en un enfrentamiento", Benedicto XVI desencadenó un ataque abierto contra el gobierno socialista del premier Rodríguez Zapatero. Y lo hizo de la peor manera. En España "ha nacido una laicidad, un anticlericalismo, un secularismo fuerte y agresivo, como vimos en los años '30". Benedicto XVI trazó así un paralelo entre las épocas de la Guerra Civil, la República Española, el franquismo, y el actual gobierno de Madrid. No fue una declaración espontánea porque las respuestas a las preguntas que hacen los periodistas son vistas de antemano y meditadas.

El Papa habló 17 minutos con los periodistas que lo acompañaban en el avión y dedicó un buen bloque "al mundo occidental, con su secularismo, su laicidad y la continuidad de la fe", que debe renovarse y responder al desafío de la laicidad.

El caso de España es "muy fuerte". Ha sido "siempre un país originario de la fe". El Papa citó a figuras como San Ignacio, Santa Teresa y San Juan de la Cruz. "Pero es también cierto que en España nació un laicismo, un anticlericalismo, un secularismo fuerte y agresivo como vimos en los años ´30". El Papa agregó: "este choque entre fe y modernidad, ambos muy vivaces, se realiza hoy de nuevo en España".
El Papa reconoció que cuando hace poco creo un "ministerio" vaticano para la "nueva evangelización", pensaba sobre todo en Occidente y especialmente en España, a fin de recuperarlos para que no se pierdan en la descristianizacion y el secularismo.


Después de celebrar una multitudinaria misa en la plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela y de pedir ante la tumba del Apóstol Santiago «por todos los hijos de la Iglesia», el Papa ya se encuentra en Barcelona.

El avión en el que viajaba ha aterrizado en el aeropuerto del Prat de Barcelona a las 21.06 horas, apenas seis minutos después de lo previsto, y a su llegada le esperaban el presidente de la Generalitat, José Montilla, el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu y el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, entre otras autoridades.

No han habido parlamentos ni discursos, pero sí un saludo afectuoso y cálido para todas las autoridades antes de entrar en el coche que le ha trasladado al Arzobispado de Barcelona, donde cenará y se alojará.

En la plaza de la Catedral, frente al Arzobispado de Barcelona, centenarse de fieles, la mayoría de ellos jóvenes llegados desde diferentes puntos de España, han celebrado efusivamente la llegada del Papa con cánticos como "Sí, sí, sí, el Papa ya está aquí" o "Que bote la juventud del Papa". Muchos llevan desde las cinco de la tarde montando guardia tras el cordón de seguridad habilitado por los Mossos d'Esquadra.

Como recompensa a quienes llevaban esperando tantas horas, el Papa se ha saltado el protocolo y ha salido al balcón del Palacio Episcopal, desde donde ha saludado a los fieles y los ha bendecido.

Consagración solemene

Al Santo Padre le espera mañana una larga jornada que empezará a las 9:00 de la mañana, cuando el "Papamóvil" abandone el Arzobispado y ponga rumba a la Sagrada Familia. Durante el recorrido, de unos 3, 5 kilómetros, Benedicto XVI recorrerá la Avenida de la Cetedral, Via Laietana, Pau Claris, Diputación, Marina, Provenza y Mallorca, por donde accederá a la Sagrada Familia a través del Portal de la Gloria.

Una vez en el interior del templo, el Papa se reunirá con Sus Majestades los Reyes y se vestirá en la sacristía para celebrar la Misa de dedicación de la Sagrada Familia. A las 12:00, rezará en Angelus frente a la fachada del Nacimiento y a las 12.45 regresará al Arzobispado para comer con un centenar de cardenales y obispos.

Por la tarde, a las 17.15, Benedicto XVI visitará la Obra Benéfico Social Nen Déu y, antes de despedirse oficialmente en el aeropuerto del Prat a las 19.15, se reunirá con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

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